úsame como prefieras
al fin y al cabo
ya perdí la cuenta
de cuantos nombres
has tenido bajo nuestras sábanas
úsame como prefieras
al fin y al cabo
ya perdí la cuenta
de cuantos nombres
has tenido bajo nuestras sábanas
ella me extendía
en el vaivén de sus caderas
se presionaba en la oscuridad
para degustar el pálpito
la deleitaba mi rigidez
sin percibir siquiera
mi cadáver enfriando
su entrepierna
Y, en el instante en el que vi su cuerpo rodar por las escaleras, comprendí que, hasta entonces, nunca había sido feliz.
…el vacío en su alma era demasiado desgarrador para continuar intentándolo. Quitó el anillo de su dedo y lo ubicó junto a un trozo de papel que yacía intacto sobre la mesa de noche desde hacía más de una semana. Subió a la azotea, aún en pijamas, y se suspendió en el borde para contemplar sus dedos acariciando el vacío. Cerró los ojos, extendió los brazos, y la ausencia en su pecho le indicó que, por primera vez, tenía el control de su destino. Se dejó caer en las manos de Newton y la gravitación universal. La vida no pasó ante sus ojos, no hubo redención, no encontró la libertad ni el control efímero de hace unos instantes; solo el terror, solo la precipitación en alianza con el pánico para desdibujar su rostro. Sumido en la impotencia del arrepentimiento emitió un grito sordo para terminar despertando envuelto en las sábanas del dormitorio. Fue por un vaso con agua para despejar la mente, para diluir el miedo. Al entrar de nuevo en la habitación las reflexiones yacían en el olvido.
A la mañana siguiente el vacío en su alma era demasiado desgarrador para continuar intentándolo. Quitó el anillo de su dedo y lo colocó junto a un trozo de papel…
Soy la muerte que señala
El arma que apunta
El último aliento de unos
el más agonizante de otros
Soy espejo de mi creador
Voy más allá de raza o religión
Mi canto resuena a mí alrededor
Soy quien atraviesa la piel
rompe el corazón
y se queda alojada en el alma
del que no cayó
Soy venganza protección
o carta de presentación
Soy única para el que cae ante mí
pero solo un rastro de pólvora
para el que me deja ir
He escrito la historia del hombre
a través de los siglos
He cambiado de formas y tamaños
pero mantengo mi letra e inspiración
siempre he cumplido mi función
Soy muerte soledad angustia
Soy poder autoridad dominio
Soy el arma
Soy la bala.