Se deslizan las canas por el tiempo
Transitan las décadas por mi infancia suelta
Se despliegan las angustias en un juego
Me mantuve atento en espera de la transición
Permutaron mis pasos en la transformación del espejo
Se extraviaron los colores de mi voz
Cambié mis pupitres de sueños por escritorios de realidades
Pero sigo aquí
Recordando mi reflejo
Escuchando mi canción
Soñando otras realidades
Esperando la hora de salir a jugar.
Que hermoso Albert! No dejemos que las ganas de salir a jugar desaparezcan a pesar de tener el pelo blanco 😉
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Gracias, Elia. Que bueno que te gustó. Un abrazo.
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MUY BUENO ALBERTO MUY BUENO
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Siempre habrá un minuto, un espacio, para que asome ese niño reflejado en el espejo de tus recuerdos.
¡Muy bonito, Albert!
¡Un abrazo!
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Gracias Saricarmen. Un abrazo para ti.
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Preciosa página. ¡Enhorabuena!
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Muchas gracias, Manuel. Saludos.
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